abril 22, 2022

LA PALABRA NO NECESITA UNA NOTARÍA

 


“La dignidad y la verdad en un hombre empieza por su palabra”

En la política algo de que se hace mucho alarde, es de la honradez, la lealtad y el compromiso que tiene quien piensa ser un servidor público, de esto hacen mucha propaganda los seguidores o afectos de un candidato.

La verdad es algo que se busca dentro de una campaña política y más si se trata de la búsqueda del empleado público que va a tener mayor rango dentro del gobierno, persona que debe ser ejemplo ante los ciudadanos a los que le va administrar sus impuestos e inversiones.

En Colombia las elecciones presidenciales se han caracterizado por el desprestigio, las negociaciones entre mafiosos, acuerdo con grupos guerrilleros y lealtad ante el corrupto y el hipócrita.

No se escapa nadie de ser tildado de corrupto, paramilitar, narcotraficante o guerrillero, aunque algunos sí lo son, a pesar que sus votantes se rasguen las vestiduras por defenderlo y ocultar su pasado, pero la verdad nunca termina escondiéndose bajo las piedras.

La palabra de los candidatos en Colombia está en juego en estas elecciones para la presidencia del periodo 2022 al 2026, pues se juega el verdadero futuro del país y más cuando hay figuras que llevan el idealismo comunista dentro de sus deshonrosas venas.

La dignidad de un candidato no se puede poner en duda y debe ser el mismo candidato el que con su forma de expresarse y de defender sus ideas y planes demuestre su honorabilidad, así no tendrá ninguna duda el ciudadano que piense votar por él.

La palabra no necesita notaría… La palabra es lo más importante de un hombre, aunque algunos tienen que ir a una notaría para que su palabra tenga algo de valor, y esto se vio recientemente con el candidato socialista Gustavo Petro.

La palabra no necesita una notaría… Qué un candidato a la presidencia vaya a una notaría a hacer un contrato para demostrar que no miente, es patético y sus planteamientos e ideas ya no cuentan con mucha credibilidad.

La traición más grande que puede tener un servidor público es mentirle al soberano, de esto tiene mucho el guerrillero Gustavo Petro, tanto así que sabiendo por los pasos en los que andaba la “Senadora” Piedad Córdoba la nombra miembro leal del mal intencionado Pacto Histórico.

Hoy las mentiras y las triquiñuelas de las que se ha valido el socialista Gustavo Petro para engañar a sus fieles seguidores, se derrumban como baraja de naipes con cartas marcadas, a él sólo le creen resentidos o personas que piensan que destruyendo a los ricos van a salir de su pobreza, cuando la pobreza mental que tienen, es más peligrosa que la pobreza real.

El escritor estadounidense John Calvin Maxwell nos enseña que no hay que ir a una notaría para ponerle valor a la palabra o la dignidad, él dice “Existen dos tipos de orgullo, el bueno y el malo. El “Orgullo bueno” representa nuestra dignidad y nuestro amor propio. El “orgullo malo”, es un pecado mortal de superioridad que apesta a presunción y arrogancia” Estas dos diferencias son fundamentales para obtener buenos principios éticos, es por esto que los colombianos deben analizar, estudiar y comprender muy bien la palabra que sale de la boca de los candidatos que desean ser el nuevo presidente de Colombia.

 “Quien vota por mentiras, sus sueños siempre reposarán en almohadas llenas de arrepentimientos”

 

 Luís Córdoba Reyes

 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Excelente artículo, gracias por compartirmelo Luis, fuerte abrazo desde Bogotá.