septiembre 14, 2020

EL FONDO





“El hombre sólo encuentra el fondo tres metros bajo tierra”

Siempre se ha escuchado que las cosas cambiarán cuando toquemos fondo, pero una de las condiciones del hombre es sobrevivir y es por eso que el fondo no tiene límite, por tanto el tocar  la sima resulta un asunto muy  subjetivo.
La casta de líderes socialistas conoce muy bien esa condición que vive dentro de una sociedad o comunidad, por ende sus promesas son alentadoras y el famoso fondo se vuelve llevadero y amañador.

Venezuela no deja de ser un ejemplo de lo malo que es el socialismo y a la vez el aguante que tiene una sociedad humillada, maltratada y engañada por una oposición que lleva años  ilusionando a los venezolanos con sus supuestos logros, cuando la verdad sólo han servido para mantener al tirano en el poder con color y mal olor de demócrata.

El fondo en Venezuela no termina de llegar y todo gracias al mismo ciudadano que por su instinto a sobrevivir de esa tragedia termina por darle más valor a un litro de gasolina que a su propia libertad, cuando sabemos que con unos cuantos litros sólo se logra avanzar  unas cuantas cuadras, mientras que con la libertad se llega muy lejos.

Si los venezolanos siguen esperando tocar fondo para que haya un estallido social se quedarán vestidos y desilusionados, porque la falsa oposición siempre logrará cavar más hondo  para que sus promesas de cambio no toquen también el suelo.

Mientras ese fondo se sigue viendo en el triste horizonte venezolano, el tirano y sus súbditos continúan haciendo negocios electorales con los que se desgarrar la garganta gritando abajo el usurpador y, por el otro lado, el interinato y sus compinches preparan salidas diplomáticas para que el fondo se dilate un poco más.
Si lo venezolanos continúan solucionando sus problemas con el cuento de “Esto es lo que hay”  el tirano y el interino no dejarán de hacer sus negocios para que sus cuentas bancarias no logren ver nunca el tan nombrado fondo.

Seguir bajando la cabeza por miedo a la represión o al temor de una expropiación, hace que el fondo se convierta en una futura salida, cuando lo que vemos es que día a día el ciudadano es reprimido psicológicamente y expropiado emocionalmente para mantenerlo esperanzado a un cambio próximo y, a otros, a la pronta llegada de las dadivas por parte del tirano y ahora del interino también.

¿Será qué el fulano fondo es la solución? Púes lo dudo mucho, ya que siempre habrá quien le encuentre la parte positiva a lo malo y eso, es lo que más alimenta al asesino socialismo, de este tipo de individuos los encontramos en todas la clases sociales, en los de abajo para alentar al vecino, en los del medio para decir que aun se puede vivir y, en los de arriba para animar a los de abajo.

Si el ciudadano no cambia esa capacidad de adaptación y conformismo frente a las circunstancias que les prepara el sistema, nunca logrará modificar su calidad de vida y los que gobiernan seguirán en el poder.

Sócrates considerado como el padre de las filosofía occidental nunca se permitió ver el fondo y por eso decía “No la vida, sino la buena vida, es lo que debe ser más valorado”.
La vida debe ser valorada cualitativamente para poder apreciarla bien, según este filósofo griego; es por eso que no se puede permitir vivir en el fondo creyendo que aun no se ha llegado.

“El hombre para ser libre tiene que quitarse del pensamiento esa frase socialista y de consuelo que dice … gracias a Dios tenemos salud”.


Luís Córdoba Reyes

1 comentario:

Josman dijo...

Me gusta esta publicación...excelente