“Cuando el hombre no piensa, lo engañan con un pedazo de pan
haciendo creer que es oro”
Colombia eligió a su máximo empleado, el que administrará
los bienes de cada uno de los ciudadanos y defenderá su libertad como su
democracia, democracia que ya escasea en América Latina. Solo había dos
opciones en la mesa, una de ellas ganó y manejará el idealismo socialista y
marxista mientras la otra habría podido manejar el capitalismo donde la economía es parte de la propiedad
privada de cada uno de los colombianos.
El odio y el resentimiento, que por envidia puede llevar a
Colombia por el triste y doloroso camino de la miseria y el dolor, camino que
las familias colombianas no merecían seguir por culpa de tomar una decisión hacia
el socialismo.
Con todos los problemas socio económicos que tiene Colombia,
es un país donde se disfruta una calidad de vida, calidad de vida que no valora
el colombiano que, por no tener una buena posición económica, todo lo ve mal y
termina echándole la culpa al gobierno de turno. Un mitómano en Colombia. Gustavo
Petro es un idealista marxista que viene prometiendo eliminar la pobreza,
cuando entre su sapiencia brilla una pobreza mental a nivel de economía y
gerencia, embaucando a sus seguidores con promesas demagógicas y populistas.
Un mitómano en Colombia… El guerrillero Gustavo Petro no
deja de florecer en su retórica viejos discursos del asesino Hugo Chavez, quien
sus promesas hechas en 1998 fueron cambiadas de la noche a la mañana, después
de haber tenido a sus electores en la cama y bien ilusionados.
Las similitudes del discurso de Gustavo Petro con las de
Hugo Chavez, están; las de gobernar un solo periodo, no estar de acuerdo con la
reelección, estar de acuerdo con un referéndum si no sirve como gobernante, el
respetar la propiedad privada dejando a un lado la sed de expropiación, no
involucrarse ni censurar la prensa, respetar la constitución y no meterse con
la industria privada.
Estas promesas ya las maneja el encantador de serpientes, el
socialista de Gustavo Petro, cuando sólo necesita tener el poder para darle la
vuelta a la tortilla, logrando destruir la democracia y la economía, con el
único fin de crearles necesidades a los colombianos para luego someterlos por
las dádivas que son los subsidios.
Chavez prometía acabar con la corrupción cosa que
multiplicó, en este aspecto ya Gustavo Petro está formando sus pilares con el
patético Pacto Histórico, para modificar la constitución a sus anchas.
Espero que los votantes por Petro en vez de molestarse por
lo aquí dicho, tomen un poco de su tiempo para que investiguen todo lo que
estoy escribiendo, esto les ayudará para saber quien es su candidato y como
actúan los idealistas marxistas.
Colombia cayó en las manos de un mitómano, que, con su
verborragia intelectual, manipula a los ignorantes jóvenes que solo hacen
escuchar y obedecer, cuando un poquito de lectura e investigación los libraría
de un mal futuro.
El expresidente estadounidense Abraham Lincoln tenía razón
en sus palabras cuando decía “Nadie tiene la memoria suficiente para mentir
siempre con éxito. Podrás engañar a todos durante algún tiempo; Podrás engañar
a alguien siempre; pero no podrás engañar siempre a todos.”
Los colombianos estamos a tiempo para evitar que el país se
hunda en la pobreza y luego flote en la miseria de la igualdad que brinda el
socialismo.
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